El Espía

Antes de morir, en 1970, Alyesa Bazna otorgó una entrevista en su humilde departamentito de la ciudad alemana de Munich, donde vivía con su esposa (mucho más joven que él)y sus cuatro hijos.
El nombre de este turco no les dice nada, pero si les comentara que este tipo fue el espía llamado "Cicero", seguramente se acordarían de él.
Durante casi dos años, trabajó para la Alemania nazi pasándole documentos fotografiados que sacaba del portafolios del embajador inglés en Angola, cuando trabajaba a su servicio como ayuda de cámara.
Fueron un centenar de documentos que fotografiaba en la noche y los pasaba; utilizaba para el transporte a algunas mujeres que le obedecían ciegamente, conquistadas por su poder de seducción.
Fue tan importante su actividad dentro del espionaje que los alemanes supieron, por él, de la invasión aliada a Normandía. Aunque no lo creyeron, pensando que era un bluff de la inteligencia inglesa.
Este hombre, de una gran autoestima, se consideraba un genio y, orgulloso, proclamaba que "Cicero" (apodo que, según él, se lo había puesto Hitler) fue el más grande espía del mundo. "Había que tener mucho coraje para hacer lo que yo hice" -dijo y, también, que él había salvado a la civilización occidental. "Los alemanes prefirieron reforzar el este de Europa para que los rusos no tomaran el continente entero" -afirmaba.
Uno de sus grandes hobbies era cantar ópera y su berretín era ser tenor. Conocía mucho del género y, ante el periodista que lo entrevistó, se puso a cantar con una mano en el pecho un aria de Puccini.
Lo que quedó en la nebulosa y él nunca lo reveló, era si su función no fue la del agente doble. "Cicero" había ganado mucho dinero con el espionaje, pero había sido estafado por dos alemanes (uno de ellos, yerno de Ribbentrop)que le canjearon las libras turcas por libras esterlinas y éstas, según el éspia, habían resultado falsas.
Vivía pobremente y ante la pregunta consabida, dijo que él nunca había sido nazi, que lo que hizo lo hizo por Alemania, país al que amaba a pesar de que él era turco, nacido en la ciudad de Prístina, Yugoslavia, cuando esta zona pertenecía al Imperio Otomano.
En realidad, Bazna se llevó a la tumba el secreto de si había trabajado para el Foreign Office inglés, suministrándole a los alemanes documentos que los ingleses querían que los germanos conocieran.
Pero más allá de estos vericuetos del espionaje, "Cicero" se hizo famoso mediante un libro y, luego, una película que se llamó "Cinco Dedos" y que contaba la historia del espía. El personaje lo interpretaba el actor James Mason.
Según Bazna, no cobró un centavo por estos derechos, estafado por su agente literario. Lleno de claroscuros, se extinguió la vida de este hombre que vivió 66 años, que había gozado de las mujeres más bellas y que pasó a la historia como un notable espía alemán.

ROBERTO DIAZ

(Escritor, poeta, periodista, traductor de habla inglesa, autor de canciones, con premios nacionales e internacionales. En el año 2007fue reconocido como "PERSONALIDAD DESTACADA DE LA CULTURA POR LA CIUDAD AUTONOMA DE BUENOS AIRES" en la Legislatura porteña.)